Un rumor sordo recorre
como filo las barracas
se siente pesado el aire
vigilantes las miradas
la huelga de hambre se viene
galopando en su potranca
mujer niños afuera
los hombres dan la batalla.
Primer día de vigilia
sin novedad todo pasa
la noche pierde su rastro
donde empieza la alborada
comienzan a marchitarse
pero afuera poco cambia
tercer día el carcelero
la huelga quiere quebrarla.
Se nota que no conoce
la fortaleza del pobre
que cuando entra en la pelea
no hay fuerza que lo soborne
y las mil bocas siguieron
sólo con gusto salobre
gusto a muerte y esperanza
sabor que conoce el pobre.
Y así pasaron los días
hasta llegar al octavo
cuando algunos enfermaron
lo cuidaban sus hermanos
pero la huelga seguía
más firme el segundo tramo.
Ya empieza a moverse el pueblo
en los cuatro cardinales
mitines, actos de apoyo
repudio al indeseable
hay una cosa que es clara
Pisagua debe acabarse.
Las horas pasan muy lentas
se agrandan las soledades.
Cuando han pasado diez días
queriendo vencer el hambre.
Hombres de hierro estos viejos
duros como los metales.
A los doce o trece días
cuando la muerte rondaba
trajo su echona de plata
la carta o el telegrama
con letras de oro decreta
la muerte para Pisagua
las lágrimas se atropellan
los ojos son dos cascadas
compañeros a reponerse
ganamos esta batalla.
como filo las barracas
se siente pesado el aire
vigilantes las miradas
la huelga de hambre se viene
galopando en su potranca
mujer niños afuera
los hombres dan la batalla.
Primer día de vigilia
sin novedad todo pasa
la noche pierde su rastro
donde empieza la alborada
comienzan a marchitarse
pero afuera poco cambia
tercer día el carcelero
la huelga quiere quebrarla.
Se nota que no conoce
la fortaleza del pobre
que cuando entra en la pelea
no hay fuerza que lo soborne
y las mil bocas siguieron
sólo con gusto salobre
gusto a muerte y esperanza
sabor que conoce el pobre.
Y así pasaron los días
hasta llegar al octavo
cuando algunos enfermaron
lo cuidaban sus hermanos
pero la huelga seguía
más firme el segundo tramo.
Ya empieza a moverse el pueblo
en los cuatro cardinales
mitines, actos de apoyo
repudio al indeseable
hay una cosa que es clara
Pisagua debe acabarse.
Las horas pasan muy lentas
se agrandan las soledades.
Cuando han pasado diez días
queriendo vencer el hambre.
Hombres de hierro estos viejos
duros como los metales.
A los doce o trece días
cuando la muerte rondaba
trajo su echona de plata
la carta o el telegrama
con letras de oro decreta
la muerte para Pisagua
las lágrimas se atropellan
los ojos son dos cascadas
compañeros a reponerse
ganamos esta batalla.
inviata da adriana - 20/8/2010 - 09:09
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Fonte:Pacoweb